19 de noviembre de 2010 (R. Ojalvo/Cocina.es) – Alimentarse bien no es necesariamente comer lo que más nos gusta, ni los mejores productos del mercado, sino sobre todo ingerir la cantidad de energía justa que necesitamos. En función de esto, si queréis dar con vuestra dieta ideal o con la de vuestros hijos, os proponemos dos consejos básicos. El primero se extrae directamente de lo dicho anteriormente, y no es otro que intentéis siempre comer lo justo y necesario, en función de vuestras características y de la actividad diaria que realicéis. Para saber la cifra exacta de calorías diarias que necesitáis, lo más recomendable es que acudáis a vuestro médico de cabecera. Él os explicará qué es alimentarse bien ajustándose a vuestro caso particular. No obstante, también podéis encontrar programas como éste, que os ayuden a realizar el cálculo sin la ayuda de nadie.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta que la adecuación entre la ingestión de calorías y las características de cada persona, no lo son todo a la hora de establecer una dieta ideal, sino que también hay que prestar atención al reparto de nutrientes. En este sentido, es conveniente saber que para alimentarse bien, todos debemos cubrir a diario en nuestra dieta el mínimo recomendado de proteínas (que rondaría el 10-15% del total de las calorías ingeridas), el de grasas (un 30-35% aproximadamente) y el de hidratos de carbono (en un 50-60%).