Actualmente, la normativa en España permite abrir terrazas en los bares solamente durante seis meses (coincidiendo con los meses de mayor bonanza climatológica), y supone un gravamen sobre los empresarios hosteleros que las instalan. Ante dicha limitación, y con el fin de compensar los supuestos perjuicios provocados por la ley anti-tabaco, Pedro Castro -presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias– declaró ayer en Álava su deseo de que las normativas municipales sufran una adaptación a la nueva coyuntura, que permita a los hosteleros mantener sus terrazas gratis y durante todo el año.
Las reclamas de Pedro Castro, respaldadas por el conjunto de los grupos políticos integrantes de la Comisión Ejecutiva de la FEMP, hacen mención también a la «incorporación nuevos mecanismos de control» que permitan regular, por ejemplo, la utilización de estufas en las terrazas, un tipo de mobiliario que, en muchos municipios -como es el caso de Álava-, no están reconocidos en las normativas. No obstante, en sus peticiones, la FEMP hace hincapié en la necesidad de extremar las advertencias en lo que se refiere a la regulación del tamaño y a los modelos de terrazas, o al uso de las mismas en horario nocturno, con el fin de «conciliar la vida profesional con el derecho de todas las personas al disfrute y al tránsito por la vía pública».