A estas alturas, pocas son las personas que no conocen las Bayas de Goji y que no han escuchado hablar de sus muchos beneficios. Estas pequeñas bayas rojizas provienen de China y del sureste de Europa, lugares donde crece el Lycium barbarum, planta de la que son fruto, pero desde hace tiempo las podemos encontrar tanto en supermercados, como en herbolarios o tiendas de frutos secos, y se venden como un producto que «va bien para todo«, «la fruta de la longevidad y la salud». Pero, ¿hasta qué punto es verdad todo esto?
Hace tiempo que la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) nos informó sobre la falta de evidencias científicas acerca de tales beneficios, pero ahora ha dado un paso más y en un estudio realizado sobre 10 muestras distintas de Bayas de Goji, no sólo corrobora la ausencia de muchos de los beneficios que se le atribuyen, sino que además añade que «contienen gran cantidad de pesticidas, algunos ilegales en Europa, y metales pesados como cadmio, cobre y plomo«, lo cual no es alarmarte a pequeñas dosis, si bien grandes ingestas podrían provocar una intoxicación aguda.
No obstante, es obvio que «cuando el río suena, agua lleva«, y en este caso algo sí que llevan las bayas de Goji. Concretamente, una gran cantidad de antioxidantes que hacen que estos pequeños frutos, unido a su prolongado uso como planta medicinal en China, hayan tenido tan buena acogida en la población.
Y tú, ¿ya has probado las bayas de Goji? ¿Qué opinión tienes sobre ellas?