Lo bueno y lo malo de las conservas

Las latas de conservas son un invento de principios del siglo XIX, que en su día supuso una verdadera revolución en la forma de entender el envasado y la conservación de la comida. En la actualidad, sólo hay que darse un paseo por cualquier supermercado o echar un vistazo a nuestras  propias despensas, para darse cuenta de la importancia que tienen las conservas en nuestras vidas. Pero, ¿son totalmente buenos o pueden resultar nocivos los alimentos conservados en latas de conservas?

Para que estéis tranquilos, a continuación os haré un pequeño resumen sobre todo lo que hay que saber de las conservas.

Lo bueno:

1. Las conservas nos permiten transportar, almacenar y consumir productos elaborados en un amplio margen de tiempo.

2. Productos como las verduras pueden permanecer almacenados hasta 2 años, mientras que las carnes y pescados en aceite pueden aguantar hasta 5 años en latas de conservas.

3. En condiciones normales que aseguren su hermetismo, las conservas garantizan la conservación de los alimentos y de los valores nutricionales de los mismos.
Los aceites o salsas que acompañan a algunas conservas, pueden incluso aumentar los valores nutricionales de algunas conservas.

Lo malo:

1. En su interior, las latas están bañadas de resinas que, en casos de transporte o almacenaje inadecuado, pueden acabar contaminando los alimentos.

2. Una entrada accidental de aire en una lata de conserva (por oxidación, por un golpe, etc.), puede provocar bolutismo, una enfermedad con unos síntomas parecidos a los del cólera.

Teniendo esto en cuenta, la conclusión que extraemos es que las conservas en sí son un buen recurso que, no obstante, requiere tomar ciertas precauciones. Para curarse en salud, los expertos recomiendan mirar bien las latas antes de añadirlas al carro de la compra, comprobar que han sido almacenadas en lugares secos, con la temperatura adecuada, y que no tienen desperfectos como abolladuras o arañazos. Además, antes de abrir las latas de conservas, se recomienda lavarlas, y una vez abiertas, si no se consumen totalmente, es preferible guardar los alimentos en el frigorífico en un recipiente aparte.

Ya sabemos todo lo que hay que saber… ¡Ahora, a dar la lata!

Foto: jlastras

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2 comentarios en “Lo bueno y lo malo de las conservas”

  1. Las latas tambien empiezan a desprender laminas, lo que caen en las comidas que alli se encuentran y esto nos puede causar daños, por eso no es recomendable guardar los alimentos en evases de lata o consumir alimentos enlatados, ademas existen otras formas de conservar los alimentos

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