En España, las ensaladas se han entendido tradicionalmente como acompañantes de un plato mayor; o tomadas solas, como cenita light o comida de grillos de algún obseso de la figura.
Yo aprendí a tomar ensaladas como plato mayor y comida única en Francia, las primeras veces como recurso para salir con vida de algún restaurante caro, y luego con todo conocimiento de causa, por verdadera vocación.
Allí, a las ensaladas con sustancia se les llama salades gourmandes (algo así como ensaladas para comilones, para amantes del buen comer), y tienen mucho más que hojitas de lechuga.
Mi definición de ensalada gourmande, por lo que he aprendido de nuestro país vecino, sería algo así como una mezcla entre el contenido de una ensalada tradicional, y el de un segundo plato a base de carne, pulpo, embutidos variados, etc. Depende de la región.
Otro elemento fundamental de las ensaladas gourmande es el aliño, que debe ser sabroso, aunque acorde a los gustos de cada cual. La que yo os he preparado para la ocasión, es una rica combinación de dulces y salados, en la que el ingrediente principal es el pollo, y los secundarios, los canónigos, el pan de higo, las almendras y la manzana.
Ingredientes (para 2 personas):
300 gr. de pechuga de pollo
200 gr. de canónigos
120 gr. de pan de higo
1 manzana
150 gr. de almendras crudas
1/2 cebolla
Aceite de oliva
Vinagre de módena
Pimienta molida y sal
Elaboración de la ensalada gourmande:
1. Pochamos la cebolla en una sartén con un buen chorro de aceite de oliva. Cuando esté pochadita, añadimos el pollo, y condimentamos con un poco de pimienta y sal.
2. Las almendras las podemos tostar por separado, o incorporarlas directamente a la sartén y dejar que se doren lo justo.
3. Por otro lado, lavamos los canónigos, los escurrimos bien, pelamos la manzana, cortamos el pan de higo en daditos, y lo mezclamos todo. Aliñamos a gusto con sal, vinagre y aceite, siempre en este orden.
4. Mezclamos todo bien en un bol, y emplatamos.
Si sois de los que apreciáis las combinaciones equilibradas pero originales de dulces con salados, esta ensalada gourmande os la recomiendo. otra cosa, a mí me molesta mucho encontrar ingredientes rarunos en las recetas que me impidan hacerlas tal cual las relata el creador, y aunque el pan de higo es de temporada y no es demasiado difícil de encontrar, si no tenéis a mano, podéis sustituirlo por dulce de membrillo, dátiles, uvas o ciruelas pasas, orejones, etc.
Sí, era justo lo que iba a decir, que yo cambiaría el pan de higo por dátiles.
¡Qué rica debe estar! Me la apunto 😉
Los dátiles le van a ir perfectos, y si quieres añadirle algo más, estoy seguro de que este ensalada casa perfectamente con quesos muy diferentes: desde los fuertes como el queso azul, hasta quesos frescos, queso feta, etc. Y como siempre, a mayor calidad de los ingredientes, mayor calidad del producto final. ¡Que te aproveche la ensalada, Andrea!
tiene toda la razon mi compa
Rapida,fácil y encima buenisima!!
¡Esa es mi filosofía! Gracias Pío 😉
¡Ya hay pan de higo todo el año! A ver si me preparo una ensalada de estas pronto, que ahora apetece comer fresquito ^^