Legay Choc es una panadería cuya especialidad son los panes y pasteles con forma de falo, que aromatiza y alegra los rostros de quienes caminan por el 45 de la rue Ste. Croix de la Bretonnerie, en el corazón mismo de París. Se trata de una panadería y pastelería artesanal, pero con muy poco de tradicional. Es una factoría de bollos con mucha miga, de «panes penes», de baguettes recién salidas del armario con el orgullo por todo lo alto, de barras calientes y candentes, de dulces tentaciones con formas políticamente incorrectas, etc. Alardeando con el ingenio que me despierta tan sugerente producto, podría decirse incluso que en vez de una panadería, la Legay Choc es una «penedería» en toda regla en la que el tamaño no importa tanto, y en la que el secreto no sólo está en la masa, sino fundamentalmente en la forma.
Como si de una arteria nerviosa canalizando el vital fluido se tratara, los «panes penes» de Legay Choc llevan ya 12 años desperdigando sus tiernos migajones por las mesas de los parisinos, y proclamando a los cuatro vientos que con la comida sí se juega. Migas que serán para muchos el mejor de los argumentos para mojar en la yema de un buen huevo; ese placer prohibido que, por miedo a las «miradas puñal», hay quienes a estas alturas, aún disfrutan sólo en la intimidad. Panes que no son grandes o pequeños, como en el resto de las panaderías, sino «panes glandes» y «micropanes». Panes que no se sirven en una vulgar bolsa, sino en paquetes. Panes que no hay que tirar al día siguiente si se acaban poniendo duros.
Las estanterías de «panes quitapenas» de Legay Choc son todo un altar al miembro viril, un escaparate de culto al orgullo masculino y un tributo al rollo bollo y al buen humor. Y el caso es que la idea, a pesar de tener ocupado al hombre desde que éste empezó a hacer garabatos en las paredes de las cavernas, ha triunfado sobremanera, captando la atención de sus muchos clientes y de la prensa francesa e internacional. El Paris Match, la revista japonesa 30ans, y hasta la National Geographic, han concedido un momentito de gloria a los «panes penes» de la Legay Choc. Panes para mayores de 18 y que te recomendamos no llevar bajo ningún concepto a tu primera comida en casa de tus suegros.
Fotos: Legay Choc
Cualquiera pide ahí bollos de leche….a saber..
Perfecto para hacerle el bocadillo a la niña para ir al cole
Bueno la imaginación es libre….
Cosas más «graves» y «erótico-fectivas» se han visto (https://www.cocina.es/2012/03/14/natural-harvest-recetas-con-semen/)
Es una buena indirecta con que amenizar una cena romántica. Aunque, pensándolo mejor, alguna dama podría pensar que el pretendiente más que romántico es demasiado directo, incluso algo garrulo.
No vamos a hacer chistes sobre si sentiríamos cierto cosquilleo desagradable al partir estos panes por la mitad, ni tampoco bromas fáciles sobre cómo quedaría relleno de leche condensada. Vamos a ser maduros, que esto es un blog de cocina serio, no vaya a pensar cualquiera que los post con más comentarios son los que hablan de estas cosas.
!Hasta ahí podíamos llegar!
ESTO ME PARECE HORRIBLE POR DIOS ES COMIDA