Con permiso de Bob Esponja y de su amigo Calamardo, después de la elaboración hace escasos días de la receta del padre, el pulpo a la gallega, hoy volvemos al fondo del mar para cocinar unos exquisitos calamares en su tinta, un plato con un enorme poder de atracción visual debido a su color, y con una capacidad de seducción aún mayor por su sabor marino, y la textura de la salsa densa elaborada con tinta de calamar.
Si queréis que los calamares en su tinta os queden perfectos, como siempre, es primordial contar con una materia prima de calidad. Con esto quiero decir que aunque se podrían hacer con anillas de pota, lo recomendable es no pecar y elaborar los calamares en su tinta a partir de un calamar fresco y hermoso que limpiaremos nosotros mismos extrayéndole la jibia y las tripas, y al que luego «pediremos prestado» el saquito de tinta para la salsa.
Si el calamar es bueno y seguís la receta paso a paso pasos tal y como os relato a continuación, los calamares en su tinta son altamente adictivos. Lo más seguro es que os sobre salsa que, por supuesto, está prohibido tirar bajo penas de prisión incondicional, y que podréis congelar para usarla en un futuro en multitud de platos.
Ingredientes de los calamares en su tinta (para 2 personas):
1 calamar fresco
1/2 cebolla
1 pimiento verde grande
1 diente de ajo
Ñora molida
6 gr. de tinta de calamar
1 cucharada de Maizena
200 ml. de vino blanco
75 ml. de agua
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta
Sal
Elaboración de los calamares en su tinta:
1. Lo primero que hay que hacer, en realidad ya lo he dicho: limpiar el calamar y reservar el saquito de tinta. Luego, cortamos el calamar en anillas, y las anillas en tiras de unos 5 centímetros.
2. Picar la cebolla y el pimiento lavado en trocitos. Picar el ajo en trozos aún más pequeños, y empezar el cocinado echándolo a la cazuela con un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Luego, añadir la cebolla y el pimiento, echar un poco más de aceite si lo creéis necesario, y remover de vez en cuando a fuego medio-bajo.
3. Mientras, calentar el agua en un cazo y disolver en ella la tinta de calamar y la cucharada de Maizena.
4. Cuando el pochado esté listo, añadir los calamares junto con el vino blanco, y subir el fuego para que el alcohol se evapore. Luego, echar el agua con la tinta y la Maizena.
5. Añadir una cucharadita de ñora molida. Rectificar de sal y pimienta.
6. A partir de aquí, para que los calamares en su tinta queden en su punto hay que encontrar ese punto de chapoteo «al ralentí» que nos permita cocinar los calamares al mismo tiempo que la salsa espesa hasta tener la consistencia de una cremita de verduras.
7. En aproximadamente 45 minutos, los calamares estarán en su punto.
El «moje» de la salsa de los calamares en su tinta es un ritual casi sagrado, que requiere de un pan de pueblo o pan casero, a ser posible, tostado. ¡Ah!, y no os empeñéis en sacar tema de conversación, porque con recetas de por medio como los calamares en su tinta, lo normal es que reine en la mesa el más absoluto de los silencios. ¡Que aproveche, calamares!
NOTA: si por la razón que sea no conseguís la tinta del propio calamar, o tenéis una cantidad insuficiente, en la sección de congelados del hipermercado encontraréis tinta de calamar en bolsitas, perfectamente válidas para hacer los calamares en su tinta.
Me encantan.
Delñiciosos!!!