Receta: albóndigas a la mostaza -

¿Os venís de tapas? Aprovechando que Ricardo no está (¡Ja, ja, ja, ja, qué mala soy!), voy a compartir con vosotros una de mis últimas creaciones: unas deliciosas albóndigas a la mostaza antigua, que pueden ser desde un excelente segundo plato, a una exquisita cena, o un sabroso entrante, canapé, pincho, ración, tapas, etc. Tengo que reconocer que descubrí la mostaza «a la antigua» (con los granitos de mostaza enteros, sin triturar) hace poco tiempo gracias a, mis ahora amigos, de la «Tapería la Iguana«, pero desde entonces, se ha convertido en un elixir inspirador de muchas recetas para mí, y también en un alimento adictivo. ¡Es que está buenísima!

El mejor ejemplo ideado por mí misma del poder de la mostaza a la antigua, por su sabor intenso y avinagrado, son estas albóndigas a la mostaza; albóndigas de carne fritas que no van sofritas previamente, y que quedan especialmente jugosas. Eso sí, hay que hacerlas pequeñitas para que la carne quede bien hecha con la fritura. Dejadme que os cuente cómo hace esta delicia:

Albóndigas a la mostaza

Ingredientes:

1/4 kg. de carne picada de cerdo
1 cucharada grande de mostaza «a l’ancienne»
25 gr. de miga de pan
Un chorrito de leche
2 dientes de ajo
Un puñadito de hojas de perejil
2 huevos pequeños
Pan rallado
Aceite para freír
Harina
Sal

Para la salsa de mostaza:

1 cucharada rasa de mostaza a la antigua
1 cucharada de mayonesa
1 chorrito de leche

Elaboración:

En el vaso de la picadora eléctrica, echamos el pan mojado en la leche (lo justo para que se empape y se ablande), el perejil y los dos dientes de ajo, y hacemos una picada con textura, pero sin trozos gruesos.
Volcamos la carne picada en un bol limpio, y a continuación echamos la picada de antes, los huevos, la mostaza, y un poco de sal. Removemos para mezclar todo, y si es necesario, añadimos pan rallado para ayudar a que los ingredientes se integren.
Hacemos la forma de las albóndigas, que tienen que ser pequeñas, más o menos del tamaño de ciruelas pequeñas, para que se hagan al ser fritas. Las pasamos una a una por una mezcla de harina y pan rallado.
Freímos las albóndigas en aceite caliente, y las dejamos reposar sobre papel absorbente, para que suelten el aceite sobrante.
Para hacer la salsa, mezclar la mayonesa a temperatura ambiente con la mostaza, un poco de sal, y añadir un poquitín de leche, hasta que tenga la densidad que os guste. Yo os recomiendo que quede más bien densa.

Preparación: 15 minutos

Cocinado: 10 minutos

Raciones: 6

Veredicto: 4 Estrellas: ★★★★☆

Ya me contaréis cómo os quedan a vosotros, pero mi experiencia en casa con estas mini albóndigas, ha sido inmejorable. A todo el mundo le han parecido exquisitas. Luego, imaginación al poder, sería interesante probar a meter otros ingredientes como cebolla caramelizada picada, algo de bechamel para transformarlas en croquetas, jamón, especias, etc. ¡Pero que no falte la mostaza!