Si eres de los que te cortas de hacer recetas con bechamel porque piensas que hacer bechamel es complicado, sigue leyendo y aprenderás a hacer bechamel fácil, rápido y sin grumos. ¡Garantizado!
Juego con ventaja, ya que yo mismo padecí de los dolores que describo, y llegué a cogerle un poco de manía a hacer salsa bechamel. De hecho, cuando publiqué la receta de la bechamel casera hace cuatro años, aún no conocía los secretos para hacer bechamel fácil sin grumos que os vengo a contar ahora.
Una de las ventajas de estar metido en este mundillo, es que de vez en cuando tengo la suerte de trabajar con gente que sabe de cocina. El año pasado, sin ir más lejos, grabando los vídeos para la sección de recetas con vídeo de Recetascomidas.com, aprendí a hacer bechamel sin grumos de la mano de Benjamín Caballero, del Restaurante Botein (Cáceres) y, aparte de llevarme la grabación para casa, hice un par de anotaciones en un pos-it (que aún tengo pegado en el frigorífico de mi cocina) sobre cómo hacer una bechamel fácil sin acabar con un esguince de muñeca en el intento, y que hoy quiero compartir con vosotros.
El vídeo de la receta tal y como nos la enseñó el mencionado chef, os lo dejo a continuación, pero conviene seguir leyendo los consejos que os resumo para hacer bechamel perfecta a la primera, y otros detalles prácticos que, sin duda, os pueden facilitar mucho las cosas en la cocina.
Receta de la bechamel fácil sin grumos
Más que una receta al uso, a continuación voy a desgranar los cuatro secretos para hacer salsa bechamel sin esfuerzo:
1. Los ingredientes de la bechamel
Sólo faltaría que no supieras cuáles son los ingredientes de la bechamel. Vale, está bien, por ahí hay que empezar, pero hay algo muy importante que no puedes dejar al libre albedrío, y es el empleo de cada ingrediente en sus proporciones exactas.
Cuando la hayas hecho 10 veces, seguro que le coges la medida y no necesitas pesar los ingredientes, pero si es la primera vez que intentas hacer bechamel fácil después de previos intentos fallidos, tienes que saber que para 1/2 litro de leche, debes usar 30 gr. de harina y otros 30 gr. de mantequilla. Al gusto de cada cual puede quedar el empleo de más o menos nuez moscada en polvo o de sal, pero yo no os recomiendo más de una 1/2 cucharadita rasa de nuez moscada y 1 cucharadita de sal.
2. Tamizar siempre la harina
Es un detalle tan simple, como imprescindible. Si no pasas la harina por un colador o por un tamiz, ten por seguro que vas a tener que pelearte con los grumos.
3. La temperatura de la leche
Os confieso que a veces la he hecho con leche a temperatura ambiente, y no he tenido problemas siguiendo el resto de consejos, pero sin duda ayuda a hacer bechamel fácil más rápido y sin riesgo alguno de grumos.
4. Batir con varillas
Si no has probado nunca, pensarás que es una tontería, pero no te imaginas hasta qué punto es necesario dejar la cuchara de palo para otros menesteres y batir la salsa bechamel siempre con un batidor de varillas de mano normal y corriente, como éste:
Controlando estos cuatro factores, la receta de la salsa bechamel fácil se resume en derretir la mantequilla en un cazo mientras calientas la leche, echar toda la harina tamizada sobre la mantequilla y remover con las varillas durante un minuto más o menos; añadir la leche caliente y remover con las varillas manteniendo el «chup-chup» característico hasta lograr el espesor deseado. Después de menos de 3 minutos de batida, lo normal es que tengas la bechamel hecha.
Bechamel con aceite de oliva
Yo lo hago muy habitualmente, y con esto te respondo: sí, claro que se puede hacer bechamel con aceite de oliva en vez de mantequilla. De hecho, el espesor que se consigue al final no depende del uso de uno y otro ingrediente. En todo caso, hay diferencias en el sabor bastante sutiles. En todo caso, te recomiendo usar un Arbequina o cualquier aceite de oliva virgen extra de sabor suave, que no se lleve por la cara el protagonismo de la salsa bechamel.
Se puede congelar la salsa bechamel
Es otra de las preguntas clásicas. Si un día haces lasaña, es una pena hacer bechamel para lasaña y no aprovechar para llenar un par de tupperwares de bechamel en el congelador, ¿no crees? Pues ten claro que la bechamel se puede congelar sin ningún tipo de problemas. Debes tener en cuenta simplemente que, una vez descongelada, cuando quieras usarla, tienes que calentarla en un cazo a fuego medio y darle un minuto de varilla para conseguir que la salsa bechamel recupere el tono cremoso.
¡Bechamel fácil, sin grumos! ¡Objetivo cumplido!
Yo la hago siempre en frío,sin grasa alguna,sin tostar la harina. Disuelvo a modo del colacao en la leche la harina,en frío,ya digo, y luego su sal y nuez moscada correspondientes. La mantequilla le da su toque,naturalmente! Pero el precio lo pagan nuestras arterias.Y hasta ahora me ha ido muy bien. Me rindo ante el sabor, pero ya digo,es un precio alto. Muchas gracias!
Saludos!
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Me parece una opción más que interesante. Sólo me queda una duda: ¿cómo haces para disolver la harina en frío? ¿Usas la batidora? La mantequilla, ya sabes que la puedes sustituir por aceite de oliva virgen extra sin ningún problema. Yo mismo la hago así.
Gracias por tu interesante aportación, Alejandra.
Echo la harina en una olla. Echo un poco de leche. Revuelvo hasta que la integro. Un poco más de leche. Lo mismo. Se forma primero una mayonesa muy espesa, y poco a poco ( ése es el truco) la voy haciendo más líquida hasta que finalmente queda diluída. No se tarda nada. Y lo hago a mano, con unas varillas de toda la vida. Más saludos!.
Gran aportación, Alejandra. Seguramente, yo siga usando aceite de oliva para tostar la harina antes de añadir la leche para mejorar el sabor de la harina y aportar una grasa saludable que, al mismo tiempo, contribuye a dar sabor y textura a la bechamel. En todo caso, probaré tu receta, ya que me parece una fenomenal alternativa y una interesante aportación para nuestros seguidores.
¡Gracias! 😉
Excelente la bechamel. Ahora me podrías compartir cómo hacer las croquetas de bechamel?
Marchando una de croquetas caseras para Susana 😉