Antes de ver lo que tenemos que decirte a este respecto, tal vez deberías leer el post en el que explicamos por qué el queso azul es azul, pues ahí damos respuesta de manera parcial a la duda sobre si el moho del queso azul es perjudicial, o no.
Qué es el moho del queso azul
El moho utilizado en la producción del queso azul es el resultado del cultivo y fermentación de una cepa especial de hongos conocida por el nombre de penicillium roqueforti.
Este hongo es responsable de la formación de las vetas azules características del queso azul. Durante el proceso de producción del queso, se introduce el moho en la leche (que puede ser de vaca, de cabra o de oveja) y se permite que crezca y se desarrolle durante el período de maduración. A medida que el moho se desarrolla, libera enzimas que descomponen las proteínas y grasas del queso, lo que le da lugar a su sabor distintivo y suave textura cremosa.
Además de su uso en la producción de queso azul, el penicillium roqueforti también se utiliza en la producción de otros tipos de quesos, como el queso roquefort francés (que le da nombre) y el italiano queso gorgonzola.
¿Es perjudicial el moho del queso azul?
La respuesta a esta pregunta ya la habrás deducido, puesto que si es un producto apto para consumo, es porque cumple con todos los requisitos para ello. Aunque asociemos el nacimiento del moho con los productos en mal estado, y seguramente, el queso azul surgió a partir de quesos «atacados» de forma involuntaria por el citado hongo, el queso azul es un producto cuya naturaleza mohosa es pretendida, y que no sólo es apto para ser consumido, sino que, además, es un fantástico ingrediente con un sabor muy particular (bastante potente, en todo caso), muy versátil en la cocina.
Vaya por delante, por tanto, que el moho del queso azul no es perjudicial para el organismo, pero vamos a explicar por qué.
Aunque el moho utilizado en la producción del queso azul es una forma de hongo, no es perjudicial para la salud cuando se consume en cantidades normales. De hecho, el Penicillium roqueforti utilizado en la producción del queso azul es una cepa específica de hongo que se ha seleccionado por su capacidad para crecer en condiciones específicas y producir un sabor y aroma distintivos en el queso.
Además, el proceso de producción del queso azul implica la introducción controlada del moho en la leche y la supervisión cuidadosa del proceso de maduración. Esto garantiza que el queso sea totalmente seguro para el consumo humano.
Es importante tener en cuenta que algunas personas pueden ser alérgicas al moho o tener una sensibilidad a él, por lo que es recomendable que consulten a un médico si tienen alguna preocupación en este sentido.
¿Puede ser perjudicial comer queso mohoso que no sea queso azul?
En general, no se recomienda comer queso mohoso que no sea queso azul, ya que podría ser perjudicial para la salud. El moho en el queso puede ser peligroso si es un tipo de moho tóxico o si el queso ha sido contaminado con bacterias dañinas durante el proceso de producción.
Es importante tener en cuenta que no todos los mohos son iguales, algunos pueden ser beneficiosos mientras que otros pueden ser perjudiciales. El queso azul se produce de manera controlada y se utiliza una cepa específica de moho seleccionada por su capacidad para producir un sabor y aroma distintivos en el queso, como hemos visto. Sin embargo, otros quesos que no están diseñados para tener moho pueden contener otros tipos de moho que pueden ser peligrosos para la salud.
Por lo tanto, es importante tener precaución y evitar comer quesos mohosos que no estén diseñados específicamente para contener moho. Si tienes dudas sobre la seguridad de un queso, es recomendable consultar a un experto en seguridad alimentaria o a un médico.