La cocina de gas es uno de los electrodomésticos más utilizados en las cocinas de todo el mundo. Sin embargo, con el uso frecuente, los quemadores pueden acumular grasa y suciedad, lo que puede dificultar su limpieza.
Afortunadamente, hay algunos trucos para limpiar los quemadores de una cocina de gas que pueden hacer que esta tarea sea más fácil y rápida.
En este post, te contaremos algunos trucos sencillos para limpiar los quemadores de una cocina de gas, ya estén estos algo sucios, muy sucios o de forma ecológica.
Las cocinas de gas funcionan con gas natural o propano y ofrecen una gran variedad de beneficios a la hora de cocinar, como un control preciso de la temperatura y una cocción rápida y eficiente, que hace que sean las cocinas de los profesionales y de aquellos que quieren controlar en todo momento sus preparaciones.
Además, las cocinas de gas son tan populares entre los chefs y los amantes de la cocina, porque permiten una mayor versatilidad en la preparación de los alimentos. Desde cocinar a fuego lento hasta dorar y sellar carnes, las cocinas de gas ofrecen una gran cantidad de opciones para cocinar cualquier tipo de plato.
Sin duda, las cocinas de gas son una opción ideal para aquellos que buscan una cocina eficiente y versátil, pero tienen un «pero», que es que son más difíciles de limpiar que una vitrocerámica o una placa de inducción y se ensucian más.
Pero que sea más complicado de limpiar, no debería ser la razón por la que dejes de usar este tipo de cocinas, ya que, como hemos comentado, son, sin duda, maravillosas.
Para que sigas usando tu cocina de gas y la tengas siempre perfecta, aquí tienes unos truquitos para proceder a su limpieza:
Truco para la limpieza diaria de los quemadores de la cocina de gas
Si los quemadores no están muy sucios, o sea, para la limpieza más o menos diaria de tu cocina, puedes usa este sencillo truco en el que usarás un poco de agua tibia y jabón.
- Apaga la cocina y deja que los quemadores se enfríen para no quemarte al manipularlos.
- Retira los quemadores de la cocina. Si no sabes cómo hacerlo, consulta el manual de instrucciones de tu cocina.
- Limpia los quemadores con agua tibia y jabón suave. Si los quemadores están un poco sucios, puedes dejarlos en remojo durante unos minutos antes de limpiarlos.
- Usa un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de dientes viejo para limpiar los orificios de los quemadores. Asegúrate de eliminar cualquier residuo de comida o grasa que pueda obstruir los orificios.
- Enjuaga los quemadores con agua tibia y sécalos completamente.
- Limpia la superficie de la cocina con un paño húmedo y un limpiador suave. Asegúrate de eliminar cualquier residuo de comida o grasa que pueda haber quedado en la superficie.
- Vuelve a colocar los quemadores en su lugar y enciende la cocina para asegurarte de que funcionan correctamente.
Recuerda que es importante limpiar los quemadores de la cocina de gas regularmente para evitar la acumulación de grasa y residuos que puedan afectar su funcionamiento.
Cómo limpiar los quemadores de la cocina de gas con suciedad incrustada
Si los quemadores de tu cocina de gas están muy sucios y no se limpian fácilmente con agua y jabón, puedes probar este truco para limpiarlos:
- Retira los quemadores de la cocina y colócalos en una bolsa de plástico grande.
- Agrega un poco de amoníaco a la bolsa. No necesitas agregar demasiado, solo lo suficiente para que los quemadores queden cubiertos.
- Cierra la bolsa y déjala reposar durante varias horas o toda la noche. El amoníaco ayudará a disolver la grasa y la suciedad de los quemadores.
- Abre la bolsa en un lugar bien ventilado para evitar inhalar los vapores del amoníaco. Usa guantes de goma para sacar los quemadores de la bolsa.
- Limpia los quemadores con agua tibia y jabón suave para eliminar cualquier residuo de amoníaco y suciedad que haya quedado.
- Enjuaga los quemadores con agua tibia y sécalos completamente.
- Vuelve a colocar los quemadores en su lugar y enciende la cocina para asegurarte de que funcionan correctamente.
Recuerda que el amoníaco es un producto químico fuerte, por lo que debes tener cuidado al manipularlo y asegurarte de usarlo en un lugar bien ventilado. También es importante leer las instrucciones del fabricante antes de usar cualquier producto de limpieza.
Truco para limpiar los quemadores muy sucios de una cocina de gas, de forma ecológica
Si el uso de amoniaco no es el que más te llame la atención, seguro que este truco te va a gustar mucho, pues es mucho más respetuoso con el medio ambiente y sigue siendo un truco barato.
- Echa una buena cantidad de bicarbonato de sodio en un recipiente.
- Rocía detergente líquido (el de lavar los platos) sobre el bicarbonato de sodio hasta que quede completamente húmedo y algo líquido.
- Retira los quemadores de la cocina y colócalos en un recipiente grande.
- Cubre la superficie de los quemadores con la mezcla de bicarbonato y jabón.
- Tapa y deja secar unas horas o toda la noche.
- Pasado unas cuantas horas, destapa y riega con suficiente vinagre para crear una reacción efervescente. Deja que la mezcla burbujee y haga su trabajo durante unos minutos.
- Sigue añadiendo vinagre hasta que deje de burbujear. Si lo puedes añadir con un pulverizador mejor que mejor, para que la reacción sea más lenta y más eficaz. Si lo añades a chorro, la mezcla bicarboto/jabón se podría quitar sin hacer su trabajo.
- Usa un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de dientes viejo para frotar los quemadores y eliminar la suciedad y la grasa.
- Enjuaga los quemadores con agua tibia y sécalos completamente.
- Vuelve a colocar los quemadores en su lugar y enciende la cocina para asegurarte de que funcionan correctamente.
Recuerda que el bicarbonato de sodio, el detergente líquido y el vinagre son productos naturales y seguros de usar, pero es importante leer las instrucciones del fabricante antes de usar cualquier producto de limpieza.
Además, este truco puede requerir un poco más de tiempo y esfuerzo para limpiar los quemadores muy sucios, pero es una opción más ecológica y segura para tu hogar y el medio ambiente, que la que te hemos propuesto del amoniaco.