El bacalao dorado, al estar hecho a base de pescado, patatas, huevos, especias y aceite de oliva, es un digno representante de la cocina mediterránea.
En este caso, he variado ligeramente la receta típica portuguesa introduciendo una rodaja de salmón fresco. El resultado fue un toque de color, en lo puramente visual, y un puntito de suavidad en el sabor.
En definitiva, el bacalao dorado con salmón es una de esas recetas que definen la filosofía de Cocina.es por fácil, por rica, por sana, y por adaptarse a cualquier situación (cena formal o comida de diario).
La receta del bacalao dorado con salmón es rápida, pero hay tener el bacalao desalado (salvo que se compre en su punto de sal). Para desalar el bacalao, hay que tenerlo unas dos noches en agua, cambiando el agua unas tres veces. Pero si queréis ahorraros este paso, podéis comprarlo congelado y desalado.
¡Vamos con la receta!
Ingredientes para un bacalao dorado con salmón para 2 personas:
450 gr. de bacalao desalado
200 gr. de salmón fresco
1/4 de cebolla
2 patatas grandes
3 huevos
Perejil
Aceite de oliva
Sal
Elaboración del bacalao dorado con salmón:
1. En una rustidera con unas 5 cucharadas soperas de aceite de oliva, sofreír lentamente las patatas cortadas muy finas y en forma de paja.
2. Cuando las patatas estén doradas, las escurrimos de aceite y las dejamos reposar en un plato aparte. Mientras, en la misma rustidera, a fuego lento, freiremos la cebolla previamente picada (muy picada). Mientras la cebolla se va haciendo, vamos desmigajando el bacalao (tiene que estar desalado) y el salmón, eliminando todas las espinas.
3. Cuando la cebolla esté transparente, echaremos en la rustidera las migas del bacalao y el salmón, y removeremos durante unos minutos, hasta que pierdan el agua. Añadir también un puñado de perejil fresco picadito, y rectificar de sal.
4. Luego echaremos las patatas bien escurridas de aceite, y al final, con el fuego quitado, añadiremos los huevos sin batir, removeremos, y dejaremos que se cuajen lo justo, para que el bacalao dorado con salmón nos quede lo más jugoso posible.
Al final, como si de una ensalada se tratara, podéis aliñar el bacalao dorado con salmón con aceite de oliva crudo, para darle un toque de sabor y de humedad al plato.