Basándonos en el viejo dicho de «somos lo que comemos», muchos somos los que nos hemos preguntado alguna vez qué comerán Lionel Messi y Cristiano Ronaldo para ser los dos mejores jugadores de fútbol del mundo en la actualidad.
Pues bien, lo cierto es que tanto Messi como Cristiano, a pesar de ser dos figuras antagónicas por defender los colores de dos clubes rivales, el F.C Barcelona y el Real Madrid, comparten el gusto por la cocina casera de sus madres.
Las nóminas de Linonel Messi y de Cristiano Ronaldo son lo suficientemente holgadas como para que ambos pudieran acudir a diario a el Bulli, o a cualquier restaurante de la extensa lista de establecimientos de lujo repartidos por toda España.
Sin embargo, tanto el uno como el otro cambiarían los cinco tenedores por las cucharas de las casas de sus madres respectivas. Si entramos en materia, Lionel Messi es un apasionado de la milanesa napolitana con papas fritas, del helado de chocolate, y de las medias lunas de chocolate; mientras que Cristiano, fiel a los sabores de su Portugal natal, lo dejaría todo por un bacalao a la brasa, por un guiso a la portuguesa, o por unos macarrones de su mamá Dolores.