En verano, los nuevos productos de temporada, pero sobre todo el calor intenso, nos obligan a adaptar nuestros menús diarios dando salida a nuevas recetas. De la misma forma que en invierno logramos entrar en calor gracias a las sopas, los guisos, los potajes, etc.; en verano podemos y debemos refrescarnos e hidratarnos con comidas ligeras, frías y con unos aportes específicos: menos calorías, menos grasas, y más fibras, hidratos y minerales (frutas, verduras, ensaladas, pasta, etc.).
Hidratarse en verano significa recuperar el líquido perdido como consecuencia del sudor. Se trata, por tanto, de ingerir líquidos -lo cual implica no sólo beber más agua que de costumbre, sino también de comer alimentos con un importante aporte de líquidos- y lo que es más importante, de asimilarlos. Para ponerte las cosas fáciles, a continuación os dejo una recopilación de recetas de verano que cumplen con los requisitos para refrescar e hidratar nuestro organismo:
Gazpacho
Los tomates, los pimientos, el pepino, la cebolla y el ajo, entre otros, tomados todos crudos (para aprovechar bien todos sus nutrientes) son algunos de nuestros aliados perfectos contra el calor.
Ensalada de lechuga con pepino
El pepino crudo y la lechuga tienen un gran poder refrescante, por su alto contenido en agua.
Sopa de melón y helado
Para que no falte la fruta, ni en los platos principales de la comida.
Ensalada de pasta
Una receta de pasta con queso fresco, aceitunas, jamón de york, huevo cocido, etc. Baja en calorías y rica en hidratos.
Pasta mora de zanahorias
Esto es lo más parecido a un salmorejo, pero a base de zanahorias. Y éstas, las zanahorias, tampoco pueden faltar en nuestra mesa en verano, por su alto contenido en vitaminas y minerales.
Sardinas con salsa mediterránea
Sardinas ricas en minerales con una salsa ligera. Se pueden servir frías.
Boquerones en vinagre
Otra de pescado, acompañado de tomate, aceite de oliva y albahaca.
Limonada
Beber zumo de limón o té con limón es muy importante en verano para asimilar el agua.
Tarta fría de limón
Un postre para ocasiones especiales, que también las hay en verano, con uno de nuestros ingredientes preferidos en verano: el limón.
Arroz con leche
Tomar siempre fresquito, directamente sacado del frigorífico.
Como veis, en la selección he incluido recetas de entrantes, de primeros platos, de postres y de bebidas. No obstante, en verano siempre hay un hueco para tomar fruta sola, un tomate solo cortado a la mitad con sal, o un pepino también con sal.
A la lista de ideas para cocinar la próxima semana, gracias 🙂
Me atrevería a decir que en verano es más fácil comer mejor, ya que apetecen más los alimentos crudos, y especialmente las frutas y verduras. Con un buen fondo de frigorífico en el que no falten tomates, pepinos, pimientos, melocotones, paraguayas, nectarinas, ciruelas, etc.; tengo mis necesidades más que cubiertas en verano.